La respuesta es sencilla: Sí, es malo poner un colchón sobre otro porque las consecuencias serían negativas para tu bienestar y salud integral.
Aunque en principio parece que estás más cómodo con un colchón encima de otro, con los días esto cambia dramáticamente por una razón particular, y es que cada colchón debe estar sobre su propia base para poder ofrecer sus verdaderas cualidades.
¿Es malo amontonar colchones?
Amontonar un colchón sobre otro no es lo más recomendable y estas son las razones:
- Desaparece la firmeza de la superficie y se presenta una inevitable sensación flotante que no te deja descansar durante toda la noche.
- Esa firmeza inexistente, además de evitar que concilies el sueño, ocasiona problemas a tu salud al favorecer la aparición de lesiones vertebrales, dolores musculares tanto en el cuello como en la espalda.
- El mantenimiento de ambos colchones sería muy difícil y se acelera su proceso de deterioro.
- La humedad es otro factor a tomar en cuenta porque al tener colchones amontonados se acumula en los bordes y las zonas entre tejidos, lo que da como resultado que las fibras se dañen de forma irreversible cuando el moho comience a florecer.
- Se corre el riesgo de sufrir lesiones leves y hasta graves porque puede suceder que uno de los colchones se deslice y te haga caer al suelo de manera abrupta.
- Si colocas un colchón muy blando sobre uno más rígido o firme, o hacerlo al revés es realmente muy perjudicial para tu organismo, sobre todo para tu columna. Pero si utilizas el colchón menos rígido como base, el otro, que estará en la superficie, se desplaza en exceso con cada movimiento que hagas mientras duermas y eso evitará que descanses al 100 %.
El sobrecolchón como alternativa
Este es uno de los complementos más utilizados de los sistemas de descanso. Es una gran alternativa cuando tu colchón ha perdido algunas de sus propiedades referidas al confort
El sobrecolchón es una especie de capa que se instala en la superficie del colchón para compensar determinada carencia que presenten las capas de acolchado del mismo.
Por lo general, es de una altura que oscila entre los tres y los 10 centímetros y es ajustable al colchón para evitar desplazamientos incómodos, gracias a bandas elásticas que permiten que se modifique, de manera muy positiva, la adaptabilidad de una cama, al transformar un colchón que ya no es cómodo por el paso de los años, en uno confortable que te permita descansar como mereces.
Además de hacer el colchón más cómodo y revertir las condiciones ocasionadas por el desgaste, el sobrecolchón funciona como un protector de agentes externos que pueden incidir en su deterioro como la suciedad, la humedad y la proliferación de hongos.
Otras de sus grandes cualidades son su practicidad y que es una opción más económica que cambiar el colchón en sí mismo.
Hay quienes piensan que el sobrecolchón cumple la misma función que poner un colchón encima de otro y ya ves que no es así porque esta segunda opción tiene consecuencias negativas a tu salud al, no solo perjudicar tu descanso, sino que evita la regeneración de los tejidos, afecta negativamente tu sentido del humor y ánimo y va en contra de la protección de tus músculos, articulaciones y huesos.
Sin duda, usa un sobrecolchón en lugar de poner un colchón encima de otro.
Diferencias entre cubrecolchón y sobrecolchón
Existe una confusión muy común entre estos dos términos y queremos aclarar esas dudas porque las diferencias son notables.
En primer lugar, hay que decir que al cubrecolchón …
también se le llama protector y es un tejido muy fino que únicamente tiene la función de evitar que el colchón sufra los efectos negativos de las manchas, ácaros, suciedad y bacterias, y no la de dar algún tipo de confort adicional.
Existen cubrecolchones
- Transpirables
- Impermeables
- Con tratamientos de efecto frío y hasta con aloe vera
Todo con el objetivo de proteger tu sistema de descanso.
Pero el sobrecolchón …
tiene otras particularidades, ya que se coloca en la parte superior para ofrecer una capa extra del acolchado que ya ha perdido el producto original y, de esta manera, mejora la adaptabilidad y confort general.
¿Cuándo usar un sobrecolchón?
Un sobrecolchón, llamado también topper, es importante decidir comprarlo cuando el colchón que estás usando ya no se adapta lo suficiente a tu cuerpo ni a tus movimientos a la hora de dormir y aún no piensas cambiar de colchón o quieres ahorrarte algo de dinero.
Pero… ¿Cómo saber que ya tu colchón perdió parte de sus propiedades?
Al dormir de lado y sentir que tanto el hombro como las caderas tienen una gran presión que te incomoda.
Al dormir boca arriba y sentir que las lumbares no tienen la adaptabilidad necesaria para que puedas estar 100 % relajado.
Amaneces con dolor de columna porque tu espalda no está alineada y tienes una mala postura al dormir, lo que podría resultar en lesiones futuras.
Existe otro caso en el que adquirir un sobrecolchón se presente como la mejor opción y es cuando tu colchón sea demasiado rígido o si duermes en pareja y alguno de los dos necesita un extra de firmeza o suavidad de lado de su cama, y en este caso en particular puedes decidirte por un topper individual que cubra la mitad de la cama, y así ambos podrás estar cómodos y descansar plenamente.
Recuerda: La base sobre la que debe reposar el colchón es el sustento de tu propio sueño, al garantizar que el equipo de descanso cumpla con su función plena al aportar un descanso placentero cada noche y que te permita enfrentar con energía y sin malestares el día a día.